Ayer se cumplió un año del comienzo de la andadura de Arunda Silente. La Domus Silentium, su sede, fue inaugurada con toda solemnidad y abrió sus puertas con una magnífica exposición de pintura de Heinz Greissing.

Ha sido éste un año precioso en el que hemos ido dando pasitos gracias a quienes habéis confiado en nuestras propuestas. No os imagináis con cuánto asombro y agradecimiento estamos asistiendo a estos comienzos: continuamente vemos confirmadas esas intuiciones que reunieron a quienes decidimos aportar nuestro granito de arena para sacar adelante esta iniciativa de desarrollo y crecimiento personal. Estas “confirmaciones” nos llegan a través de las devoluciones que nos hacéis quienes habéis participado en alguna de nuestras actividades. Es un motivo de auténtico gozo ver cómo resuena en vuestro interior lo que compartimos en cada encuentro.

Poco a poco y con ayuda de todos los que os habéis acercado a Ronda con motivo de alguno de los encuentros, hemos ido ajustando contenidos e introduciendo mejoras. Vuestras sugerencias nos han ayudado mucho  y, sobre todo, hacen realidad algo que anhelamos todos los que estamos «entre bastidores» diseñando propuestas y trabajando para que Arunda Silente continúe creciendo: acoger todo lo que la vida nos trae en la seguridad de que eso es precisamente lo mejor. Gracias de corazón por todo; por tanto.

En este sentido, siguiendo la intuición de escuchar la realidad y de acoger lo que nos presenta, el comienzo del 2022 nos hizo un inmenso regalo: la posibilidad de comenzar a desarrollar un proyecto precioso con nuestros caballos.  Los que nos conocéis sabéis que el eje vertebrador de nuestra actividad es el silencio que favorece el autoconocimiento y la posibilidad de vivir totalmente presentes en el presente. Si hay alguna receta para alcanzar la felicidad que nuestro corazón anhela, estamos convencidos de que la atención es un ingrediente que no puede faltar para vivir una vida plenamente humana. Pues bien! Nuestros caballos son esos maestros silenciosos que nos enseñan, casi sin que nos demos cuenta, a estar presentes como lo están ellos. No os imagináis cuánto aprendemos a su lado!!! Algunos de vosotros ya habéis tenido oportunidad de comprobarlo.

Os animamos a participar en alguno de nuestros encuentros. No dudamos de que repetiréis! Os esperamos con los brazos abiertos para seguir creciendo juntos y haciendo de Arunda Silente una realidad viva que nos ayude a desarrollarnos en la persona que verdaderamente somos.

Feliz aniversario a todos!!! Confiamos en que éste sea el primero de una larga serie de años cargados de los frutos del encuentro.